Walden. Henry David Thoreau

Henry David Toreau

Walden


En 1845 Thoreau abandona la casa familiar de Concord y se instala en la cabaña que ha construido junto a la laguna de Walden. Pero no se marcha a los bosques para «jugar a la vida», sino para «vivirla intensamente de principio a fin». A partir de esa experiencia escribe uno de los clásicos fundamentales del ensayo moderno.

Walden es tanto un experimento literario sin precedentes como un manual para la buena vida: un libro escrito contra toda servidumbre y a favor de la felicidad como única riqueza del ser humano. Walden es una defensa de la vida libre y salvaje, así como una crítica feroz de la sociedad y sus imposiciones, que apenas han variado desde aquella fecha. Walden es un cuestionamiento radical y directo de la institución del trabajo como adocenamiento y del mercado como único dios, así como una lúcida defensa de la simplificación de la vida y del camino que nos lleva a perseguir su esencia y sus placeres cotidianos.

Walden es una reflexión sobre la necesidad de preservar tanto la naturaleza y el planeta como el meollo de nuestra propia existencia individual e irreductible. Walden habla de lagunas salvajes y hombres sabios, alces y shakespeares, esclavos huidos y trabajadores sonámbulos, las montañas de Nueva Inglaterra y el Bhagavad Gita, la belleza del fuego hogareño y la Gran Nevada, el silbido devastador del ferrocarril y el recóndito ulular del búho, la erudición de los indios Massasoit y la banalidad de los eruditos de Harvard, la belleza absoluta de la soledad y la importancia inconmensurable de la amistad, el bienestar que exhiben las marmotas y el malestar que aqueja a la mayoría de los seres humanos.

Según el propio Thoreau, «Walden es un libro escrito para esa mayoría de hombres que está descontenta con su vida y con los tiempos que le ha tocado vivir, pero que podría mejorarlos. Y también para aquéllos en apariencia ricos, pero que en realidad han acumulado cosas inútiles y no saben muy bien qué hacer con ellas».

Comprar libro

Puntuación


Reseña


El 4 de julio de 1845, Henry David Thoreau se adentró en el bosque para vivir solo, en una pequeña cabaña junto a las orillas del estanque Walden. Durante los dos años que pasó en este lugar, escribió este libro, un texto que se ha convertido en un referente sobre la vida simple y realiza una reflexión sobre el consumismo en la sociedad.

Thoreau se retiró a este entorno remoto con el propósito de pensar y escribir, viviendo solo con lo esencial: comida, refugio, ropa y calor.
En los primeros capítulos describe las razones que le llevaron a realizar este «experimento». Construyó su propia casa con sus manos y cultivó su propio alimento, viviendo una vida autosuficiente, en armonía con la naturaleza.

¿Para qué necesitamos y queremos tener tanto si casi no nos da tiempo a disfrutar de las cosas? ¿Realmente ser rico por tener más objetos materiales te hace más feliz? Hay cuestiones muy interesantes en este libro en el que te hace pensar si podríamos vivir con mucho menos y disfrutar más de las cosas que nos rodean. Sorprendentemente, a pesar de haber sido publicado en 1864, Walden es un libro moderno y muy consciente de la ecología.

El autor proporciona descripciones muy detalladas de la naturaleza y sus observaciones en el día a día. Hay uno de los capítulos que me ha gustado mucho titulado «Primavera» en el que Thoreau nos muestra a través de sus ojos los cambios que ocurren tras el duro invierno, describiendo cómo todo a su alrededor vuelve a renacer.

Tal como me ha pasado con otros libros de Errata Naturae, me ha encantado imaginarme en mitad del bosque atendiendo solamente a lo que me rodea, a través de sus letras nos acercamos al estanque, vemos cómo poco a poco se va derritiendo la nieve, los animales que lo visitan… Nos permite descubrir todo lo que hay a su alrededor, en un lugar remoto lejos de la sociedad.

Considero que Walden no es un libro para todos los públicos. Su prosa algo arcaica y con descripciones muy detalladas pueden resultar densas y difíciles para algunos lectores. Sin embargo, es un clásico que merece la pena leer, aunque cueste un poco, ofrece una valiosa perspectiva sobre la vida y la naturaleza.

En definitiva, Walden es toda una llamada de atención para relajarte y disfrutar de las pequeñas cosas de la vida. Un empujón para animarte a hacer una vida minimalista y vivir plenamente con menos.

«Fui a los bosques porque quería vivir deliberadamente, enfrentarme sólo a los hechos esenciales de la vida y ver si podía aprender lo que la vida tenia que enseñar. Quise vivir profundamente para no descubrir, cuando tuviera que morir, que no había vivido».

Privacy Preference Center